jueves, 21 de mayo de 2020

MENOR SEGURO EN RED


DECÁLOGO DEL BUEN USO DE INTERNET

Es importante como padres, tutores o educadores trasmitir a los menores la importancia de reflexionar antes de publicar cualquier contenido en la red, de no realizar acciones o comentarios que no les gustaría que les hicieran a ellos, y recordarles que deben desconectar y dedicar tiempo a otras actividades. 

Estas son algunas recomendaciones para que hagan un buen uso de Internet.




viernes, 15 de mayo de 2020

PLAN DE ACCIÓN


DISEÑA TU PLAN DE ACCIÓN

El siguiente esquema es un plan de acción para mejorar la integración de los derechos de infancia en mi centro educativo teniendo en cuenta los conocimientos adquiridos.
Mi centro educativo es un I.E.S. de un pueblo grande, que cuenta con enseñanzas de Bachillerato, Ciclos Formativos de Grado Medio y Superior y Formación Profesional Básica. Situado en una zona que presenta un nivel socioeconómico medio-bajo.

La mayoría del alumnado es español, pero también hay inmigrantes, sobre todo sudamericanos, este llegando a un total de un 10%. La participación de los padres y madres de alumnos en la vida del centro es baja en relación a la comunicación mediante las tutorías, posiblemente debido a que un número importante de alumnos son mayores de edad. 
La Asociación de Madres y Padres de Alumnos no es muy activa, aunque esto es suplido por un núcleo de ellos, que forman la Junta Directiva de dicha Asociación, y que mantienen con el Centro un vínculo alto en cuanto a colaboración e identificación con la labor del Centro y las necesidades de mejora.
Por ello, este sería mi plan de acción para la mejora de los derechos de la infancia.






lunes, 11 de mayo de 2020

¿ERES TAN ANÓNIMO EN LA RED COMO TE CREES? #NoSeasEstrella



¿ERES TAN ANÓNIMO EN LA RED COMO TE CREES? #NoSeasEstrella


En mi opinión el principal riesgo de la exposición de la vida privada de niños, niñas y adolescentes es Internet.


Todos sabemos las múltiples ventajas que supone Internet, sobre todos quienes nacieron en los años noventa o antes. Sin embargo, de la misma forma en la que encontramos beneficios, como pasa en todos los escenarios donde tiene participación el ser humano, también se presentan peligros.

Hay que concienciarse sobre la importancia del uso seguro de Internet y de utilizar las nuevas tecnologías desde un uso consciente, responsable y seguro.

Las principales amenazas que estos niños, niñas y adolescentes sufren son:

Abusos sexuales en línea:Esta amenaza hace referencia a todas las formas de abuso sexual facilitadas por las tecnologías de la información y/o difundidas por medios en línea.
Ciberacoso: Se trata de formas de hostigamiento y agresión que se produce entre pares, teniendo como medio las nuevas tecnologías, con intención de propagar imágenes o mensajes crueles.
Exposición a contenidos nocivos: Exposición de estos, de forma intencionada o accidental, a contenido violento o generador de odio, siendo esto perjudicial para su desarrollo.
Grooming: estrategias que realiza un adulto para ganar la confianza de estos, a través de Internet, con el propósito de abusar de él o explotarlo sexualmente.
Publicación de información privada
Happy slapping: una forma de hacer civerbullying, cuando una o varias personas golpean a un individuo mientras lo graban para ser difundido en las redes sociales.
Sextorsión: chantajes mediante mensajes intimidatorios que amenazan con difundir imágenes o vídeos generados por la propia víctima.

¿Podemos protegerles desde el ámbito educativo?

La respuesta es sí ¿Y cómo?.

No debemos dejar de lado la importante tarea de los docentes de enseñar a nuestros alumnos el desarrollo seguro de habilidades de los menores en Internet, especialmente cuando desde casa no se tiene el conocimiento sobre las amenazas y el uso de la tecnología.

Hay que formar a padres y educadores para que actúen como agentes de prevención primaria, de manera que se logre llegar a todo el tejido social.

Nuestros esfuerzos deben estar enfocados en desarrollar actividades y charlas sobre la educación en temas de civerseguridad, así como ofrecerles herramientas de protección.

Cabe destacar, que es muy necesario tratar de estos temas desde los niveles básicos de educación ya que cada vez es más temprana la edad en la que estos niños y niñas empiezan su relación con Internet.



LA EDUCACIÓN POR INTERNET

Ésta, está experimentando un gran auge. Cada día hay más formación online y cada vez más alumnos siguen estos cursos. La mayoría de ellos se muestran muy satisfechos con la enseñanza recibida.

Esto es así porque Internet es un excelente vínculo para la comunicación humana y la enseñanza un proceso de comunicación entre el profesor y el alumno.
Pero como hemos comentado anteriormente, hay muchos riesgos para el alumnado si no hace un buen uso de Internet.

Por ello, el diseño de intervención educativa que voy a realizar aborda los siguientes puntos:

  • Fomentar entre el alumnado el uso responsable de las redes.
  • Advertir de los principales riesgos que conlleva una sobreexposición de la vida privada.
  • Integrar protocolos de detección, protección y actuación que ayuden a tu alumnado a saber cómo actuar en cada caso.


El tipo de alumnado al que va dirigido son adolescentes de 16-17 años que cursan 2ºFPB y a sus familias.

Objetivos: 

  1. Informar de los tipos de redes sociales más actuales y de sus ventajas e inconvenientes.
  2. Ventajas e inconvenientes de la educación en Internet.
  3. Fomentar las nuevas tecnologías desde un uso consciente, responsable y seguro.
  4. Dar a conocer las herramientas de control parental y filtros.
Contenidos:

  1. La educación en un contexto de cambio. Redes sociales.
  2. Los peligros más significativos en las redes sociales.
  3. El papel del docente y del estudiante en las redes sociales para el aprendizaje.
  4. Plan de actuación centro-familias.
Actividades:

Introduciremos el tema mediante una lluvia de ideas previas. ¿Qué sabemos de las redes sociales y de la educación online?

En esta lluvia de ideas participará tanto el alumnado como sus familias para así poder abordar el tema y ver qué conocimientos previos tienen los adolescentes y los adultos.
También analizaremos las palabras claves: redes sociales, estrategia de aprendizaje, herramientas web, educación online y las redes sociales más actuales que existen.




Abriremos un debate exponiendo las ventajas e inconvenientes de las redes sociales para alumnos y familias y contrastaremos sus respuestas.



Utilizaremos vídeos e imágenes significativas con casuísticas sobre peligros que pueden aparecer para los alumnos haciendo un uso indebido de las redes sociales y así concienciarlos.



Mediante un ejemplo, explicaremos el papel que tenemos los docentes, por un lado, y el alumnos, por otro lado, en el uso de las redes sociales para el aprendizaje.




Por último, estableceremos un plan de actuación centro-familias. Este plan tiene como objetivo establecer una serie de normas y ayudas para el alumnado en materia de redes sociales. Así docentes y familias podemos actuar e intervenir de forma conjunta para favorecer este aprendizaje.




Evaluación:

Para poder evaluar esta intervención educativa, diseñaré dos tipos de cuestionarios:
Uno que me permita analizar qué sabían alumnos y familias sobre las redes sociales antes de la intervención y otro que me permita analizar qué conocimientos han adquirido durante la intervención .






domingo, 3 de mayo de 2020

LA PARTICIPACIÓN INFANTIL EN EL AULA, UN RETO.

La participación infantil en el aula, un reto.

En España, distintas asociaciones llevan más de 20 años desarrollando programas de apoyo a la infancia más vulnerable, proporcionando una atención integral a los niños, niñas y sus familias, para que su situación económica o de exclusión social en la que viven no les impida disfrutar plenamente de sus derechos y puedan alcanzar el máximo de sus capacidades.

La tasa de riesgo de pobreza y exclusión afecta a un 28,3 % de los niños y niñas en España, es decir, a 2,2 millones. 
Actualmente, estamos presenciando un estado de pobreza en la infancia atípico en el modelo social democrático que caracteriza a nuestro país. Las cifras de pobreza infantil han ido aumentando progresivamente desde el comienzo de la última crisis financiera y seguirán aumentando, a pesar de la existencia de planes estratégicos a nivel nacional, de medidas asistenciales por parte de organizaciones y del estado y, a pesar de haber ratificado, en el año 1991, la Convención de los Derechos del Niño de 1989.

Hay investigaciones que, además de pretender describir objetivamente la situación actual de la infancia de España, basándose  en datos oficiales de diferentes entidades e instituciones estatales, han querido dar voz a los niños y niñas de España.

Estas investigaciones recorren todas las provincias españolas para conocer sus sueños (entendidos como sus derechos a atender en este trabajo) y, a partir de ellos, establecer una propuesta de mejora realizable desde el centro y cuya relevancia radica en la verdadera participación infantil en su entorno próximo.

Actualmente, uno de cada tres niños en España está en riesgo de pobreza o exclusión social. Los niños y niñas españoles son el grupo social que más sufre las consecuencias de la crisis económica y de los recortes en las ayudas sociales.

¿Qué podemos hacer desde el centro para atender estos derechos?

Aquí es dónde cobra especial relevancia el concepto de participación. Hay diversos autores que llevan a cabo el estudio del impacto de la misma. Según explica Lansdown (2005), este impacto hace referencia a “evaluar el nivel de participación logrado en las diferentes fases del desarrollo de un programa de mejora” (Márquez y Sandoval).

En este sentido, para responder a la pregunta planteada, la investigación se basa en las ideas de participación educativa de Shier (2010) y de Forestello (2013).

Para el primer  autor, la participación educativa se divide en cinco niveles o caminos de participación. El primero de ellos consiste en escuchar a los niños; seguidamente los niños cuentan con el apoyo para expresar sus puntos de vista; en el tercer paso, se toman en cuenta sus opiniones; a continuación los niños se involucran en procesos de toma de decisiones, para finalizar con un quinto paso en el que comparten el poder y responsabilidad de dicha toma de decisiones.

Para Forestello (2013), la participación educativa consiste en convivir, para lo cual se exige mínimamente implicación y participación del alumno; colaborar, para lo que el alumno debe participar de distintas formas, desde produciendo información hasta tomando decisiones o actuando; y, por último, gestionar, lo que implica altos niveles de implicación y exigencia participativa, pues la gestión lleva consigo desde producir información, pasando por el debate y llegando hasta la deliberación que conlleva la actuación de los participantes (citado en Márquez y Sandoval, 2016).

Siguiendo a estos dos autores, existen varias formas de hacer efectiva la participación infantil. No obstante, hay que tomar en consideración otros factores que afectan a dicho proceso participativo. 

Para que un centro fomente la participación de su alumnado, esta debe ser democrática, para lo cual es necesario establecer dentro de la escuela estructuras participativas y formas de funcionar democráticas.

Tal y como indican Márquez y Sandoval (2016), es necesario hablar sobre el poder, sobre su significado, sobre cómo funciona y sobre cómo opera su legitimidad. Así mismo, es indispensable que el líder directivo sitúe las estructuras de participación en el epicentro de la vida escolar y fije unos procedimientos pedagógicos.

Por tanto en los centros, los docentes, a nivel de aula, debemos conocer los procedimientos y fases que conlleva la participación educativa, así como, a nivel de centro, se hace necesario un acuerdo colectivo que establezca una organización democrática del centro.

Por otro lado, es muy importante que todo el personal educativo (familias y administración incluidas), tenga unos conocimientos básicos sobre la Convención de los Derechos del Niño. Para esto, el propio centro puede realizar charlas o jornadas de formación para madres y padres. Además de un cambio en la cultura de centro y en la formación de los padres y madres, es necesario transmitir a los alumnos y a las alumnas que su participación emerge desde el centro pero que no debe limitarse a esta.

El estudio mencionado anteriormente, está orientado a fomentar una participación real de la infancia en nuestro país, mediante la cual los niños y las niñas sean capaces de diseñar espacios sociales ideales con el fin último de mejorar la situación en la que se encuentran.

Para terminar y después de haber leído y analizado el tema, buscar diversa información, experiencias, reflexiones y  opiniones, es inevitable proponer una intervención que intente fomentar y potenciar la participación de la infancia en nuestra sociedad. No solo porque la participación activa de los niños y las niñas en nuestra sociedad es un derecho ratificado por nuestro país y que, por tanto, debemos garantizar; sino también porque sus aportaciones, sus ideas y sus perspectivas sociales enriquecen la sociedad, la hacen más completa, la hacen más altruista, la hacen más sensata.